Era cuestión de tiempo que Lenovo ampliara la familia. El Yoga Book es sobre todo un dispositivo especial, diferente, pero también es algo que puede tener bastante sentido en el mercado, así que la marca china ha decidido crear una variante más asequible llamada Yoga A12.

Tuvimos ocasión de probar con detalle el modelo original, y es bueno ir conociendo bien este producto para enfrentarnos a lo que tiene que venir. Lenovo ha pensado que el A12 será un producto que se venda únicamente con el sistema operativo Android, dejando la versión Windows para el modelo original. Se habla que en un futuro próximo habrá una versión con Chrome OS.

Pudimos adelantaros muchas cosas de este mismo producto hace unos días, pero no conocíamos todos los detalles, ni siquiera su nombre final. Pues ahora es el momento de entender qué ha querido hacer Lenovo con esta variante: inicialmente tenemos un producto más grande y menos potente, que aprovecha para bajar su precio de tarifa de forma considerable.

Un Yoga Book más asequible

Pues eso, un Yoga Book más asequible, en el que sigue presente su especificación más llamativa, que no es otra que el teclado futurista - Halo Keyboard -. Estamos por lo tanto ante una tablet Android con una configuración más parecida a la de un portátil, intentando conseguir un dispositivo en el que podamos ser más productivos.

El tamaño de pantalla táctil crece hasta las 12,2 pulgadas en el Yoga A12, de ahí su nombre, pero sigue manteniendo un peso muy ligero, inferior al kilo. En la parte más delgada el producto presume de no sobrepasar los 5,4 milímetros, y no por ello anda mal de autonomía ya que es capaz de llegar a las 13 horas de vida.

Para el que tenga curiosidad por su configuración física, hay que decir que teclado y pantalla van juntas, no se pueden separar. Eso sí, las bisagras permiten girar ambas partes en 360 grados, y es lo que le da las diferentes posibilidades de visualización: presentación, quiosco, tableta o portátil.

No nos vamos a ir sin conocer las principales especificaciones técnicas, que son inferiores a las presentadas por el Yoga Book original: la resolución baja a los 1.280x800 píxeles y la memoria RAM se queda en la mitad con 2GB. El procesador principal es un Intel Atom X5 que funciona a 2.4GHz y nos dan de serie 32GB para almacenar.

¿Cuándo se pone a la venta? Pues el próximo 8 de febrero el Lenovo Yoga A12 será una realidad en los Estados Unidos, y pronto esperamos conocer más información sobre su salto al continente europeo, que no debe ser muy diferente. El precio del producto es bastante competitivo, 300 dólares, y estará disponible en el color gris original, y un rosado que reclamará la atención de muchos.

Los ordenadores diseñados para jugar están de moda, pero hay que pagar cantidades ingentes de dinero si queremos tener un equipo top. Pero hay niveles, y niveles. Siempre hay quien está dispuesto a gastarse sus euros en un Ferrari de la computación personal, y para eso hay que mirar hacia fabricantes como Overclockers UK.

Quien dice jugar, dice tener una estación de trabajo brutal, ya que el protagonista de nuestro artículo aglutina en una caja alguno de los componentes más potentes del mercado, y lo curioso es que lo hace por partida doble, ya que contiene dos sistemas hardware en uno. El equipo responde al nombre de 8Pack OrionX

Antes de entrar a conocer qué hay realmente ahí dentro tenemos que hablar de precio, y es que el 8Pack no está al alcance de cualquiera: nos piden por él 28.000 euros, que es tres veces más que el equipo ‘gaming’ más caro que podamos encontrar, y posiblemente sea el ordenador personal con el precio más alto del mercado.

Muchos componentes de máximo nivel, pero también mucho elemento artesanal, hecho a mano por los especialistas de Overclockers UK. Obviamente ha sido concebido para que lo miremos por una ventana que ocupa todo el lateral de la torre, ahí dentro hay todo tipo de sistemas de refrigeración e iluminación, destacando las tres bombas que mueven líquido para enfriar las entrañas de la criatura.

Dos ordenadores en uno

A alguno le sonará la caja, es una Phanteks Enthoo Elite, que ya ella solita cuesta por encima de los 700 dólares. Pero era necesaria para alojar esta estación de trabajo que lleva una parte gráfica monstruosa: tres Nvidia GeForce Titan X de la generación Pascal, colocadas en configuración triple-SLI. Hay opción de colocar una cuarta.

El procesador principal que se va a llevar bien con esas gráficas es un Intel Core i7-6950X, con sus diez núcleos. Lo llamativo es que todos los elementos tienen un ‘overclocking’ bastante potente: los núcleos de las Nvidia van a 2.000MHz, y el Intel llega a 4,4GHz. De ahí la refrigeración líquida para cada uno de los elementos, ninguno se queda sin su sistema.

En esta configuración principal hay espacio para 64GB de RAM, tenemos 3,2TB en formato SSD de los cuales 1TB vienen del disco ultrarápido Intel 750 PCI-E, capaz de mover datos a 2.000MB por segundo.

El segundo ordenador es un ‘pequeño’ sistema con placa base Asus ROG Strix Z270I (mini-ITX), con un procesador Intel Core i7-7700K capaz de funcionar - con overclocking - a 5.1GHz. Hay 16GB de RAM, una ‘modesta’ Nvidia GeForce GTX Titan X, y un par de discos SSD con 512GB, firmados por Samsung.

Hemos hablando del almacenamiento en formato SSD, pero hay que añadir que cada uno de los equipos cuenta con 10TB adicionales, lo que hace que el sistema completo cuente con 24TB para almacenar información.

¿Es un precio demasiado alto? Pues depende de quien lo mire, analizando los componentes principales podemos decir que cada Nvidia Titan X son 1.200 dólares, y son cuatro las que vienen de serie. El procesador principal se nos va cerca de los 2.000 dólares, y el del sistema secundario, se va a los 400 euros. Aquí hay que pagar mucho por el trabajo artesanal y el sistema de refrigeración.

By Xataka

En Microsoft llevan tiempo preparando cambios visuales en la interfaz de Windows 10. El llamado Project NEON define un nuevo lenguaje de diseño para todos los elementos visuales de este sistema operativo, y los cambios, aunque iterativos, podrían tener un resultado global sorprendente.

Eso es lo que desde luego transmiten las primeras capturas filtradas de Windows 10, que apuntan a un mayor énfasis en las tipografías y la claridad de todos los cuadros de diálogo y ventanas. Lo que hemos visto, desde luego, promete. ¿Qué os parece?

Una interfaz con muchos enfoques (y desenfoques)

Uno de los problemas que se le han achacado a Windows 10 es la inconsistencia de algunos apartados visuales, y esa es otra de las áreas en las que Project NEON tratará de unificar elementos para ofrecer más coherencia a toda la interfaz.

A esa consistencia se le unirán animaciones visuales y también una filosofía en la que la simplicidad y ese uso de tipografías como centro de la experiencia recuerdan a la interfaz que veíamos en los Zune.

Entre los elementos destacables está un componente llamado "Acrylic" que hará que la ventana quede enfocada pero el fondo, la barra lateral o la zona de navegación de una ventana se desenfoquen: la idea aquí es ayudar a que el usuario se centre en lo importante. La llamada Conscious UI se combina con las Connected Animations para que la interfaz no nos distraiga, sino que contribuya a la productividad con esas ayudas visuales.

Estos cambios visuales también están preparados para aprovechar otras plataformas en las que funcionará Windows 10 y en especial las HoloLens, donde esos elementos visuales se comportarán de forma distinta a como lo harán en el escritorio. El conjunto de imágenes filtradas muestran una interfaz realmente atractiva.

Se espera que estos cambios comiencen a implementarse —aunque esto no está confirmado— con Redstone 3. Aún tendremos que esperar unos meses por tanto, porque primero llegará Redstone 2 ("Creators Update"), la actualización que llegará en abril. Paciencia.

By Xataka

La avalancha de equipos convertibles ha hecho que cada vez sea más habitual contar con equipos que disponen de pantallas táctiles. Las ventajas de este tipo de opción son claras para muchos usuarios que utilizan sus equipos como tablets e interactúan con esas pantallas no solo con el ratón y el teclado, sino también con distintos gestos en pantalla.

Neonode Airbar es un dispositivo para portátiles basados en Windows y Chrome OS con el que podremos convertir las pantallas no táctiles de esos equipos en pantallas táctiles. La pequeña barra que se coloca en la parte inferior de la pantalla cuenta con una serie de sensores que detectan esos gestos táctiles para trasladarlos a la interfaz de forma realmente precisa.

Gestos táctiles para cualquier portátil Windows

Las demostraciones en vídeo de su funcionamiento aclaran bien cómo trabaja un dispositivo que lleva ya un año anunciado y que por fin empieza a llegar al mercado. La barra está disponible en varios tamaños para las diagonales de pantalla más populares(13,3, 14 y 15,6 pulgadas) y se conecta al puerto USB del portátil para que éste le suministre la corriente.

El funcionamiento de la AirBar se basa en la creación de un campo de luz invisible con el que interactuamos al tocar la pantalla. Esos movimientos se traducen por parte del sistema operativo, que interpreta esos toques y gestos como interacciones de ratón.

En las pruebas se comprueba que el soporte para OSX/macOS es limitado, pero en cambio su funcionamiento con Windows es excelente, convirtiendo efectivamente en pantallas táctiles las de esos portátiles que no ofrecen la opción. El dispositivo cuesta 69 dólares y aunque de momento solo está disponible la versión para portátiles de 15,6 pulgadas pronto ofrecerá el resto de tamaños.